El poder de un tatuaje...

Hace años estaba con la inquietud de hacerme un tatuaje. Veía a un grupo muy selecto de las personas que tenían uno, en la sociedad donde vivo, los primeros que vi eran de matones y camioneteros y unas cuantas estrellas del Rock.. 

Un día viendo una película, vi uno que me emocionó, y lo empecé a ver como un tabú. Cada día pensaba como hacerlo, quería qué significara algo para mí como lo vi en esa película, no recuerdo ni siquiera cuál era, sólo el hecho del tatuaje y qué éste traía consigo un significado "poderoso".

A los años, la idea pasó a un segundo plano, así como con los piercings, con eso de que no me daban permiso (aún estaba en edad de no saber que puedo disponer de mi cuerpo como yo quiera), pero siempre sentí el deseo de poderlo llevar a cabo.

Incluso en momentos libres me tomaba el tiempo de dibujar algo que "sintiera en ese momento", pero igual seguía sin decidirme a hacerlo o no.

Primero llegaron los piercings, que son lindos adornos que llevo, hay veces que hasta se me olvida que los tengo puestos delante de quién sea. Pero llegó a mí el impulso de poder hacerle a mi cuerpo el tatuaje que tanto quería. Fue culpa de mi amigo Pur, me terminó de convencer al verlo feliz con el suyo, ese fue mi impulso. 

Primero quería algo que trascendiera y pensé: -¿Algo que trascienda? El alma-, pero Alma se llama mi mamá y creo que no querría llevar su nombre siempre porque sí bien tenía doble significado, no era precisamente mi anhelo. 

Volví a pensar: -¿Algo que trascienda?- y pasó a ser algo que perdure por siempre como un tatuaje y caí en que quería un símbolo infinito, ustedes saben, un ocho acostado... pero no sólo eso, sino que algo que significará más qué sólo "infinito"... 

¡Creer!

Creer en mí, creer en los demás, creer en lo que no veo, creer en mis sueños, en mis anhelos, en Dios, en sí... creer... 

Y así me puse de nuevo a diseñar y salieron unos cuantos no muy bonitos y otros dos que tres, llegando a cuatro... veía diseños, tipos de letras pero nada. Pasaron como 2 semanas y ya estaba un poco desesperada porque no daba con lo que yo quería... Mi corazón no sentía taquicardia y eso que dicen que se siente cuando se ve algo que uno realmente quiere. 

Un día jueves, llegó a mi mente y de un solo me salió el diseño que ahora porta mi tobillo izquierdo. Más que emocionada y no sé sí les ha pasado pero cuando tiene que suceder, todo se acomoda para que pase, de una manera fácil sin problemas... uno dice nada más "es como tiene que ser por que sí"... 

Fui a Masdeu (no lo menciono por promoción, a menos que a la próxima me hagan descuento) con mi hermana con el afán de cotizar. Pur ya me había dicho que costaba que hicieran cita y pues, fui a ver que tal... Viernes 8 de febrero, a las 11 a.m. me encontraba allí, enseñando mi diseño y me dice: -Tengo tiempo ahora, ¿te animas?- Qué más podría haberle dicho que sí... sin decirle a nadie más que a Pur y a mi hermana, ¡me animé! 

Arnoldo Castellanos iniciando mi tatuaje

Me puse fría, roja, a sudar tal cual mensa, pero en el momento en que empezaron, fue increíble, me corría por las venas la adrenalina que necesitaba, sentí como un éxtasis, me ardía por ratitos, pero para lo llorona que soy, yo sólo podía medio hacer caras y reírme. Mi mamá se enteró que estaba en esas, y medio me sacaba de mi Nirvana cada vez que me escribía acerca de cómo iba...

Al momento en que terminaron yo no cabía de la emoción, quería una foto de la obra de arte y gritarle al mundo lo bien que se sentía haberme hecho mi tatuaje. Es un signo de  infinito que lleva entre sus líneas la palabra "believe"... lo qué más me gusta, es qué es mi diseño, mi letra, mi inspiración. 

Lo veo y sonrío, se lo enseño a quién puedo, siento que me da poder... es el poder de un tatuaje, y va a estar conmigo, trascendiendo.

Busqué hace unos días que significaba el tatuarse el tobillo izquierdo, y dicen que es porque uno tiene deseos de libertad, de espacio, qué es una protesta silenciosa contra la vida cotidiana que nos aprisiona, es un sueño de liberación y de escape muy lejos. Y que por estar ubicado en ese lado, deja ver que soy alguien con muchos sueños, deseos y temores, entre otras cosas más que me reservo para mí. 
Ya estoy pensando en otro, y no es porque sea un vicio, sino que siento que, hay mucho más qué, se puede decir a través de un tatuaje... y que con ello, sentir poder a través de él...